El Gobierno plantea una revisión gradual de las cuotas
cotización autónomos 2026
El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, dirigido por Elma Saiz, ha presentado una nueva propuesta de cotización para los trabajadores autónomos que entraría en vigor en 2026. La medida, debatida en la última reunión de la mesa de diálogo social, busca consolidar el modelo de cotización por ingresos reales iniciado en 2023.
El Ejecutivo propone mantener congeladas las cuotas para los autónomos con menores rendimientos netos —aquellos que ganan entre 670 y 1.166,7 euros mensuales—, mientras que los tramos superiores experimentarían incrementos progresivos. Los aumentos oscilarían entre 2,91 y 14,75 euros al mes, dependiendo del nivel de ingresos.
Para los profesionales con rendimientos de 1.166,7 a 1.700 euros, la subida sería del 1%, y del 1,5% para quienes declaran entre 1.700 y 2.330 euros mensuales. Los tramos de 2.330 a 2.760 euros asumirían un incremento del 2%, mientras que los ingresos superiores a 3.620 euros alcanzarían una subida máxima del 2,5%.
Esta propuesta refuerza la estructura del sistema progresivo de cotizaciones, ajustando las aportaciones según la capacidad económica de cada autónomo.
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Reacciones del sector: prudencia, pero también críticas
El presidente de la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA), Eduardo Abad, calificó la propuesta como una medida “prudente” y “razonable”, destacando su enfoque en la protección de los autónomos con menos recursos. No obstante, advirtió que el Gobierno ha perdido “una oportunidad importante para mejorar las pensiones futuras del colectivo”.
Según Abad, una ligera subida en los tramos bajos habría permitido reforzar las bases de cotización y garantizar pensiones más sólidas a largo plazo. Por otro lado, consideró que el incremento del 2,5% para los tramos altos resulta “insuficiente” para alcanzar los objetivos del acuerdo de 2022, que buscaba un sistema más equitativo y adaptado a la realidad económica de cada profesional.
El dirigente sindical insistió en que los autónomos con mayores ingresos deberían asumir un mayor esfuerzo contributivo, acorde con su capacidad. A su juicio, la medida actual “aplaza el problema”, ya que en 2027 será necesario reabrir la negociación para revisar nuevamente los tramos de cotización.
El debate sobre la sostenibilidad del sistema sigue abierto, pero la prioridad del Gobierno es aliviar la carga sobre los trabajadores con menos ingresos.
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Un paso más hacia el modelo por ingresos reales
La propuesta de 2026 se enmarca en el proceso de transición hacia un sistema de cotización basado en los ingresos reales, que reemplazó el antiguo modelo de cuotas fijas. Este cambio, iniciado en 2023, pretende vincular la aportación a la Seguridad Social con la capacidad económica efectiva de cada trabajador autónomo.
El objetivo del Gobierno es lograr un sistema más justo y sostenible que equilibre la carga contributiva sin perjudicar la competitividad de los autónomos. Actualmente, este colectivo supera los 3,3 millones de personas en España, y representa una parte esencial del tejido productivo nacional.
La propuesta aún deberá ser revisada y debatida en el marco del diálogo social antes de su aprobación definitiva. De concretarse, el nuevo esquema podría marcar un avance importante en la modernización del sistema de protección social español.
Subrayar la evolución del sistema de cotización por ingresos reales y analizar el impacto de las reformas en la sostenibilidad de la Seguridad Social serán elementos clave para comprender los próximos pasos del Ejecutivo.
