Trump y Petro tensan al máximo la relación EE. UU.–Colombia

El cruce de acusaciones entre ambos mandatarios amenaza el Tratado de Libre Comercio y la cooperación antinarcóticos
Crisis diplomática entre Trump y Petro afecta el TLC Crisis diplomática entre Trump y Petro afecta el TLC

Crisis diplomática y económica entre Washington y Bogotá

La disputa entre Donald Trump y Gustavo Petro ha escalado desde un intercambio de declaraciones en redes sociales hasta una crisis diplomática sin precedentes. Las acusaciones del presidente estadounidense, quien calificó a Petro de “líder del narcotráfico”, y la respuesta del mandatario colombiano, denunciando la “ruptura unilateral” del Tratado de Libre Comercio (TLC), han marcado un deterioro inédito en una relación históricamente estrecha.

Colombia enfrenta ahora el riesgo de una doble sanción: la suspensión de la ayuda económica y de seguridad estadounidense y la imposición de nuevos aranceles a sus exportaciones. Detrás de la retórica política, se perfila una amenaza concreta para la estabilidad económica y la cooperación regional en materia de seguridad.

Durante más de dos décadas, Estados Unidos ha sido el principal socio político, comercial y militar de Bogotá. Desde el Plan Colombia, Washington ha destinado miles de millones de dólares para combatir el narcotráfico y fortalecer las instituciones. En 2023, el 27% de las exportaciones colombianas tuvieron como destino el mercado estadounidense, lo que refleja la profunda dependencia económica de Colombia respecto a su aliado norteamericano.


El impacto de los aranceles y el futuro del TLC

El anuncio de nuevos aranceles, adelantado por el senador Lindsey Graham y confirmado por Trump, constituye una violación directa del TLC vigente desde 2012. Si se concreta, Colombia perdería competitividad en sectores clave como el café, las flores, los textiles y los productos agrícolas, pilares de su economía exportadora.

Además del daño económico, un aumento de gravámenes afectaría el empleo. El sector floricultor, que da trabajo a más de 200.000 personas —en su mayoría mujeres cabeza de hogar—, sería uno de los más golpeados. También se verían comprometidos programas sociales financiados con recursos provenientes de la cooperación internacional.

El congelamiento de los 413 millones de dólares en ayudas antinarcóticos amenaza con debilitar la capacidad operativa del Estado colombiano. Estos fondos respaldan operaciones de inteligencia, erradicación de cultivos ilícitos y desarrollo rural. Como señaló el expresidente Juan Manuel Santos en el foro World in Progress (WIP) del Grupo PRISA, “el enfrentamiento entre el mayor productor y el mayor consumidor de droga del mundo solo beneficia a las redes criminales”.


Un conflicto político con repercusiones regionales

Más allá del comercio, el choque entre Trump y Petro tiene un trasfondo político y simbólico. Petro busca consolidarse como referente del antiimperialismo latinoamericano, mientras que Trump utiliza el conflicto para reforzar su discurso interno de “mano dura contra las drogas”. Ambos capitalizan el enfrentamiento en el plano político, pero sus pueblos pagan las consecuencias.

La ruptura del TLC y el fin de la cooperación no solo pondrían en riesgo la seguridad regional, sino que también debilitarían los mecanismos multilaterales que sustentan la relación bilateral desde finales del siglo XX. Si la crisis se prolonga, Colombia podría buscar nuevos socios en Asia o Europa, aunque el proceso de diversificación comercial requeriría tiempo y estabilidad institucional.

Como resultado, la disputa entre ambos líderes refleja no solo un choque de egos, sino una nueva fragilidad en las relaciones hemisféricas, donde la diplomacia ha cedido terreno a la confrontación mediática.

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