El sector privado reclama acción ante la caída económica
resiliencia industrial en Irán
La Comisión de Industria de la Cámara de Comercio de Irán alertó sobre la crisis de producción y la urgente necesidad de mejorar la resiliencia de las empresas frente a las condiciones económicas adversas. En su última sesión, los miembros subrayaron la importancia de simplificar las regulaciones comerciales, apoyar a las pequeñas y medianas empresas (PYME) y fortalecer la cooperación entre el gobierno y el sector privado.
El presidente de la comisión, Abolfazl Roghani Golpayegani, citó un informe del Centro de Investigaciones del Parlamento que revela un crecimiento económico negativo del 3%, pese a la promesa oficial de alcanzar el 4%. “La situación económica requiere una revisión urgente y decisiones inmediatas”, declaró.
Roghani destacó el papel de las cámaras de comercio como intermediarias entre el sector privado y el gobierno. “Somos la voz de las empresas. Debemos trasladar sus problemas y propuestas con precisión para que se reflejen en la toma de decisiones”, afirmó.
La Cámara también propuso mejorar las cadenas de suministro y gestionar el riesgo empresarial como pilares para reforzar la resiliencia económica, una idea central en el debate sobre el futuro de la industria iraní.
Cadenas de suministro y gestión del riesgo: claves para resistir crisis
El experto Majid Younesi presentó un informe sobre la “resiliencia empresarial con enfoque en productividad”, en el que identificó dos factores esenciales: la eficiencia de la cadena de suministro y la gestión del riesgo. Según Younesi, la resiliencia no consiste solo en sobrevivir, sino en “adaptarse y crecer incluso en contextos de incertidumbre económica”.
Añadió que el fortalecimiento de la productividad puede multiplicar la capacidad de las PYME para afrontar choques externos, como la inflación o la escasez de materias primas. Por esta razón, propuso un plan nacional de resiliencia industrial que incluya digitalización, innovación y políticas fiscales sostenibles.
En línea con esta propuesta, Mohammad Hassan Ebrahimi Yazdi, miembro de la Asociación de Automatización Industrial, abogó por diversificar las fuentes de suministro, digitalizar la gestión de inventarios y aplicar herramientas de inteligencia artificial para la toma de decisiones. “Sin innovación tecnológica, no hay resiliencia”, advirtió.
Crisis de materiales y obstáculos a la producción
El representante de la Cámara de Tabriz, Seyed Bagher Sharifzadeh, denunció la escasez de materias primas como uno de los mayores frenos para la producción nacional. “Necesitamos decisiones inmediatas para abrir fronteras y permitir la importación de insumos esenciales”, afirmó.
Sharifzadeh criticó las políticas restrictivas que “en lugar de fortalecer la resiliencia, paralizan la producción”. También propuso crear comités especializados para facilitar trámites aduaneros y garantizar el acceso a divisas para las empresas exportadoras.
Por su parte, Masoud Taamoli, miembro de la Asociación Iraní de Compuestos, señaló que el país se ha aislado de la tecnología internacional. “Hemos cerrado las puertas al mundo y, sin acceso a innovación, la competitividad se desploma”, alertó. Recomendó que los paquetes de apoyo gubernamentales se enfoquen en reducir la burocracia, más que en aumentar el gasto público.
Reformas estructurales para recuperar la productividad
Varios miembros de la comisión coincidieron en que la falta de coordinación entre el sector público y privado obstaculiza el crecimiento. Abdollah Yazdanbakhsh, de la Cámara de Mashhad, pidió “unidad y exigencia” para que los productores tengan voz en las decisiones económicas. “Si no participamos en las políticas industriales, nadie lo hará por nosotros”, subrayó.
El empresario Navid Izadpanah, director de Steel Alborz, criticó la visión de corto plazo del gobierno: “Reducir la velocidad del dinero no es resiliencia; es frenar la economía”. A su juicio, la política actual busca controlar la inflación sin fortalecer la producción, lo que genera “un conflicto entre los intereses del Estado y los de los fabricantes”.
Finalmente, Abbasali Motavasselian, de la Cámara de Yazd, denunció que Irán ocupa el puesto 174 en productividad entre 182 países, una cifra “preocupante que refleja la falta de eficiencia y planificación”. Exigió una mayor participación del sector privado en la formulación de políticas económicas y una revisión profunda del modelo de gestión industrial.
Para más información sobre la relación entre productividad y crecimiento sostenible, puede consultarse el análisis sobre industria iraní y resiliencia económica, así como el informe sobre políticas de apoyo a las PYME en Irán.
