El sector privado exige un Estado más ágil y menos intervencionista
reformas económicas en Irán
Durante una reunión entre el presidente de Irán y representantes del sector privado, líderes empresariales destacaron la urgencia de reducir la intervención estatal, simplificar la normativa y revisar el sistema de control de divisas para mejorar el entorno económico.
El presidente de la Cámara de Comercio, Industrias, Minas y Agricultura de Irán (ICCIMA), Samad Hassanzadeh, subrayó el papel de los exportadores como “motores del crecimiento nacional” y pidió al Gobierno avanzar en la reducción del tamaño del Estado y su “mayor agilidad operativa”.
Hassanzadeh también solicitó una revisión gradual del tipo de cambio preferencial y de los precios de los combustibles, con el fin de proteger el poder adquisitivo de los ciudadanos y estabilizar la economía.
Además, reclamó facilitar el retorno de inversores iraníes en el extranjero, promoviendo confianza y seguridad jurídica. “Debemos crear un entorno donde los iraníes fuera del país se sientan seguros para traer su capital”, afirmó.
Exportadores critican el control cambiario y piden eliminar trabas normativas
El presidente de la Comisión de Desarrollo de Exportaciones, Mohammad Lahouti, señaló que el sistema de repatriación obligatoria de divisas —implementado desde 2018— “ha fracasado en su propósito”. Según explicó, tanto los exportadores como el Banco Central y los ministerios implicados “están insatisfechos con su funcionamiento”.
Lahouti advirtió que la acumulación de plataformas regulatorias y sistemas paralelos ha generado corrupción e ineficiencia, proponiendo una “revisión total” del marco normativo.
Por su parte, el vicepresidente de la Cámara, Payman Bagheri, consideró que la economía iraní sufre una “burocracia excesiva y un aparato estatal costoso” que obstaculiza la inversión privada. Propuso sustituir la intervención directa por un modelo de “supervisión y regulación inteligente”.
Bagheri añadió que el presupuesto nacional ya no impulsa el desarrollo, pues se destina mayoritariamente a cubrir gastos corrientes del Estado. Instó al Gobierno a revisar la ley de lucha contra el contrabando y el sistema tributario, que “castigan injustamente al sector productivo formal”.
Ministros anuncian nuevas medidas para dinamizar el comercio y la inversión
El presidente del Banco Central, Mohammadreza Farzin, anunció la creación de comités conjuntos con el sector privado para diseñar un nuevo modelo de tipo de cambio y promover las exportaciones en los sectores petroquímico y minero.
El ministro de Industria, Minas y Comercio, Mohammad Atabak, destacó que las exportaciones no petroleras mantienen una tendencia al alza entre 2023 y 2025. Confirmó acuerdos preferenciales con Pakistán, Omán y los países de la Unión Euroasiática, lo que abrirá nuevos mercados con arancel cero.
El ministro de Agricultura, Gholamreza Nouri Qazeljeh, informó de una mejora del saldo comercial agrícola —de un déficit de 11.000 millones a 8.000 millones de dólares— y del crecimiento del 32 % en exportaciones de productos agroalimentarios durante el último año.
Por su parte, el ministro de Economía, Ali Madanizadeh, anunció un programa económico de corto plazo centrado en estabilizar el tipo de cambio, apoyar a las pequeñas y medianas empresas (pymes) y digitalizar los procesos aduaneros.
Madanizadeh enfatizó que la Ley del Séptimo Plan de Desarrollo pondrá fin al sistema de precios administrados y fortalecerá la cooperación público-privada en materia de inversión y diplomacia económica.
Una estrategia conjunta para el crecimiento sostenible
El encuentro dejó claro que tanto el Gobierno como el sector privado reconocen la necesidad de una nueva etapa de reformas estructurales. Los empresarios pidieron detener la “producción excesiva de normas”, impulsar la digitalización y adoptar políticas que “conviertan a Irán en un país más competitivo y exportador”.
El consenso general apuntó a que el futuro de la economía iraní depende de una mayor confianza mutua entre el Estado y la iniciativa privada, de la estabilidad regulatoria y de la integración internacional del país en los mercados emergentes.