Medida para proteger el poder adquisitivo
El Consejo Supremo de Trabajo de Irán ha aprobado un incremento del 45% en el salario mínimo para el próximo año fiscal, elevándolo a 103 millones de riales mensuales (aproximadamente 240 euros). Esta decisión, tomada durante una reunión este sábado, busca paliar el impacto de la inflación que supera el 40% interanual en el país.
El aumento beneficiará directamente a los trabajadores con salarios más bajos, que actualmente perciben 71 millones de riales. Además, se estableció un incremento del 32% para otras categorías laborales, junto con un complemento diario de 310.535 riales. Ahmad Meidari, ministro de Cooperativas, Trabajo y Bienestar Social, anunció que las pensiones de jubilación seguirán la misma fórmula de ajuste, con detalles que se revelarán en las próximas 48 horas.
Contexto económico desafiante
Esta medida llega en un momento de presión económica en Irán, afectado por sanciones internacionales y una devaluación constante del rial. Aunque el aumento es significativo, analistas señalan que podría no ser suficiente para recuperar el poder adquisitivo perdido en los últimos años, cuando la inflación acumulada superó el 300%.
El gobierno iraní había prometido anteriormente ajustar los salarios para compensar el alza de precios, especialmente en productos básicos. Sin embargo, empresarios advierten sobre posibles despidos y cierres de pequeñas empresas que no puedan absorber estos costes laborales.