Marco legal y alcances del reporte cambiario
El Banco Central de Irán, a través de una comunicación con el Ministerio de Industria, Minas y Comercio, ha emitido la normativa de reporte de activos y flujos de divisas en cumplimiento del Artículo 11 de la Séptima Ley de Desarrollo. Esta medida obliga a instituciones financieras, casas de cambio y exportadores a declarar todos los activos y movimientos de divisas bajo su propiedad.
El presidente del Banco Central, Mohammad Reza Farzin, destacó que los exportadores de bienes y servicios, tanto públicos como privados, deben proporcionar esta información siguiendo los lineamientos establecidos por el banco. La norma busca transparencia cambiaria y facilitar el seguimiento de los flujos financieros internacionales relacionados con Irán.
Los activos considerados incluyen efectivo extranjero, depósitos, valores y otros instrumentos financieros en moneda extranjera, mientras que los flujos de ingresos abarcan pagos por exportaciones, préstamos, inversiones extranjeras y otros ingresos provenientes de personas no residentes.
Responsabilidades y mecanismos de reporte
Según la normativa, las entidades sujetas deben reportar mensualmente los activos y flujos de divisas mediante plataformas digitales específicas. Las instituciones públicas utilizan formatos XBRL definidos por el Banco Central, mientras que los bancos y casas de cambio emplean sistemas internos de seguimiento de transacciones.
Los exportadores deberán ingresar la información a través de la plataforma de Comercio Integral, garantizando que los datos incluyan tipo de moneda, montos, origen o destino de fondos y accesibilidad de los activos. El reporte debe enviarse antes del quinto día de cada mes y la responsabilidad de la exactitud recae en el máximo ejecutivo de la entidad o en el exportador individual.
Además, el Ministerio de Industria debe coordinar con el Banco Central la infraestructura técnica necesaria para integrar los sistemas de información y asegurar que la normativa se cumpla de manera eficiente.
Impacto esperado y seguimiento
El objetivo principal de esta normativa es fortalecer la transparencia y control sobre los flujos de divisas, optimizando la política económica del país y mejorando la capacidad de seguimiento de la balanza de pagos. Se espera que la implementación sistemática permita prevenir irregularidades cambiarias y facilitar la planificación financiera y comercial de los actores económicos.
Como resultado, tanto entidades estatales como privadas deberán ajustar sus procesos internos y garantizar que toda información relativa a activos y flujos de divisas esté completa, actualizada y disponible para el Banco Central según los estándares definidos.